Sólo por el gusto de jugar…

Como en alguna ocasión lo comenté, para diferenciarse del resto de los colegas, en ocasiones debemos de hacer y estar dispuestos cosas que normalmente no haríamos, y en muchos de los casos, no lo hacemos porque el temor de hacer mal las cosas nos invade y a su vez, intentar algo nuevo siempre generará incertidumbre, dudas, especulaciones y críticas.

Yo en esta ocasión me tomé la libertad de trabajar con una vieja conocida y ex-chica Hooters Coapa, Marisol, con quien un oar de meses antes le elaboré su book fotográfico y que presento algunas imágenes aquí, y hay que resaltarlo: la niña tiene mucha gracias y talento. Además, por cuestiones de suerte, se unió a la sesión mi amiga Catalina con quien también había trabajado con anterioridad. Dos chicas muy bonitas, de diferente estilo pero sin duda excelentes modelos.

Marisol necesitaba unas fotos con otra persona, yo ya tenía ganas de hacer un dúo en estudio y Catalina al comentarle, le agradó la idea. Se cayeron muy bien y eso facilitó las cosas. Ahora la pregunta era: ¿por dónde empezar? Sin duda las poses irían saliendo a su paso, ¿pero el tipo de fotos sería el de siempre? La gente ya se acostumbró a ver mis fotos llenas de luz y de color, ya era tiempo de hacer algo diferente que sorprendiera a propios y extraños.

Pues partiendo del conocido efecto “Dragan”, hice unas adecuaciones a mi propio estilo que involucra ajustes en casi todos los parámetros de la cámara: desde el balance de blancos “erróneo” (esto es medir los blancos con valores inadecuados a la situación de luz presente), mover el histograma de color hacia tonos fríos, saturación y contraste, medición personalizada entre otras monadas.

En lo personal me sorprendí muchísimo al ver el resultado final, sencillamente fué extraordinario. El manejo de luces fué 100% indirecto y cabe mencionar que la madera barnizada fué la rebotadora, lo que ayudó a proporcionar el tono cálido (de entre lo frío de los ajustes) y en verdad no lo esperaba, y en el sitio de los chavos de EncuadreDigital.com las opiniones han sido favorecedoras.

Este tipo de fotografía por supuesto, involucra velocidades bajas y ajustes poco usuales dentro de la cámara, no en un editor de fotos, pero bien puede ser interesante y entretenido jugar en ello. Por ahora intentaré seguir jugando en ésta nueva técnica y ya veremos en el futuro que es lo que se me ocurre por hacer.